Las corrientes de resaca pueden llegar a ser muy peligrosas. Sobre todo, cuando se trata de nadadores inexpertos y cuando entran en pánico. Desafortunadamente, no pasa verano en la Costa del Sol sin víctimas mortales. Si sabemos cómo actuar cuando nos hemos quedado atrapados en una corriente de resaca, nos puede literalmente salvar la vida.
Ya estamos en plena temporada estival, la temperatura del agua es perfecta e invita al baño.
Aunque preferiríamos deleitarnos en esta imagen veraniega playera, es una triste realidad que cada año hay muchas muertes y rescates en las costas españolas, muchos de ellos debido por zambullirse en un elemento del cual desconocen los posibles peligros, como pueden ser las corrientes que pueden convertirse en trampas incluso para nadadores expertos.
Tómate unos minutos y lee nuestra entrada sobre corrientes de resaca que pueden serte útil algún día.
Qué es una corriente de resaca?
La llamada corriente de resaca (no tienen que ver con haber bebido demasiado la noche anterior) es un flujo de agua que se produce perpendicularmente a la orilla y se dirige mar adentro con más fuerza de la que suele tener un nadador. Son pasillos muy localizados que dan salida al agua acumulada en la orilla a través de los canales de resaca.
La corriente de resaca que, dependiendo del tamaño de la apertura puede tener una longitud de entre 20 y 200 metros y una anchura que oscila entre los 3 y los 7 metros. Una catapulta que lanza al bañista sin avisar, pero que no tiene por qué ser mortal si sabe nadar y actúa con calma.
Como identificar una corriente de resaca
En el mar existe un contraste entre la zona de la corriente de resaca (oleaje más calmado o inexistente) y las zonas adyacentes. Por tu seguridad, evita bañarte en esa zona.
Estas corrientes incluso pueden darse sin viento o con la bandera verde en la playa pero hay ciertos indicadores que ayudan a localizarlas:
Una especie de canal alargado de agua con turbulencias y olas diferentes a las de su entorno; una masa de agua con un color diferente (azul intenso o más apagado, arena en suspensión o espuma blanquecina); objetos flotantes que se dirigen mar adentro; cambios en las líneas de oleaje; o bancos de arena erosionados y visibles en bajamar.
Qué hacer cuando nos quedamos atrapados esa corriente
Los bañistas atrapados por la corriente intentan nadar hacia la playa, muchas veces contra la corriente, se agotan en el intento y entran en pánico.
Nunca nadar contra corriente
Una vez dentro de la corriente, lo más importante es no entrar en pánico y dejarse llevar porque la corriente dejará de arrastrar tarde o temprano:
También son conocidas como corrientes de retorno porque los flujos describen órbitas circulares, es decir, que una vez fuera de su influencia se puede regresar por un lado u otro de la corriente con facilidad.
- No luchar contra la corriente.
- Escapar de la corriente nadando en dirección paralela a la orilla. Cuando esté fuera de la corriente, nadar diagonalmente lejos de ella y hacia la orilla.
- Si no se logra escapar nadando, mantenerse a flote será siempre la prioridad, hasta que la corriente deje de arrastrarle mar adentro (raramente esa distancia será de más de 50 metros).
- Cuando la corriente se haya disipado, entonces hay que nadar diagonalmente lejos de ella y hacia la orilla.
- Si en algún momento se siente que no se puede alcanzar la orilla, debe pedirse auxilio a gritos o agitando los brazos.
Cómo ayudar a alguien atrapado en una corriente de resaca
- Salvo que seas socorrista acuático, no lo intentes. Hay muchos desenlaces fatales de personas que murieron ahogadas intentando salvar a otro. Pide ayuda.
- Si no hay socorrista, llamar al ⚠️servicio de emergencias (112 Gratuito) ⚠️y pedir ayuda.
- Luego indicar a la víctima la manera de escaparse mediante gritos o señas.
- Si es posible, arrojarle un flotador.
IMPORTANTE. Para afinar un poco más, en las opciones de escape debemos tener en cuenta la corriente litoral (paralela a la playa). Si no es así, podemos correr el riesgo de entrar de nuevo en la corriente de resaca de la que pretendemos escapar. Regla de oro: Buscar las olas con la espuma blanca (olas de traslación). Son las olas rompientes que nos empujarán hacia la orilla con menos esfuerzos. Son las que buscan los surfistas. Más información y gráficos: http://www.corrientesderesaca.com