La historia de Torremolinos se divide en varios periodos:
Torremolinos data de la época prehistórica cuando los hominidos entraron en Europa y colonizaron este continente más frio, por razones aún desconocidas por los antropólogos. La llegada a la costa de Málaga por el norte de África no está lo suficientemente clara y es por lo que se piensa que llegaron desde el norte.
Los restos prehistóricos más importantes que se encuentran preservados son los que se han encontrado en las diferentes cuevas de la provincia, como la Cueva de la Pileta (cerca de Ronda), donde se han encontrado herramientas como puntas de flecha y pinturas simples de esta primera colonización.
En otras excavaciones arqueológicas se han encontrado restos con aproximadamente 600.000 años de edad, aunque la llegada documentada a Torremolinos la encontramos en hace 100.000 años.
Entre los lugares más importantes destacamos las cuevas que se usaban en el día a día de aquel entonces: Cueva del Encanto, Cueva del Tesoro, Cueva del Hostal Guadalupe y Cueva de Bajondillo...entre otras que ya han desaparecido. Tristemente el ayuntamiento ha decidido cerrar todos los accesos en lugar de ofrecer la oportunidad de visitar las cuevas.
Aunque otras culturas como la fenicia y la tartesa se asentaron en los alrededores, no sería hasta la llegada de los romanos que Torremolinos no sería considerado como asentamiento. Fue durante la batalla entre el imperio romano y el imperio de Cartago durante el año 206 antes de nuestra era, cuando los romanos tomaron la península ibérica.
Málaga en general y Torremolinos, por su proximidad al mar, fueron un lugar clave en la producción de salazón de pescado y el 'Garum', salsa muy demandada entre la clase alta de Roma.
Las diferentes ruinas romanas se encuentran totalmente abandonadas por el ayuntamiento y uno puede visitar libremente los restos de las villas y factorías romanas. Los restos que no fueron abandonados fueron ocultados con construcciones modernas sobre ellos.
Hay multitud de descripciones árabes de Torremolinos durante el reinado, y hay evidencia del enterramiento de un sultán. Se sabe que durante el pasado árabe de Torremolinos, los molinos eran una parte importante de su economía, estaban situados cerca de 'Torre Molinos'.
El pasado árabe de Al-Andalus no nos ha dejado un gran patrimonio en Torremolinos exceptuando la famosa Torre Molinos, un símbolo del municipio que fue usada como torre de vigilancia por los árabes, actualmente se encuentra en estado de abandono por el ayuntamiento.
Tras la conquista por parte de las armadas cristianas, la 'Torre Molinos', construida por los árabes, continuó siendo usada como primera linea de defensa contra los ataques piratas Fue durante el año 1501 cuando se establecieron 3 soldados, que ganaban cada uno 25 maravedies, quienes tuvieron que encender fuegos al avistar enemigos en la costa. Estos tres soldaros serían los primeros tres vecinos de Torremolinos.
Debido a la constante incursión de piratas, los molinos árabes que seguían siendo usados fueron abandonados y se trasladaron más hacia el interior.
De este periodo quedan unos pocos molinos que pueden ser visitados hoy día:
Molino de Inca:
Actualmente es una zona botánica que sigue conservando su antigua estructura.
Molino de Batán:
Este molino restaurado se encuentra justamente frente al Molino de Inca y se usa para reuniones y otros eventos sociales.
Molino de Zea
Actualmente en completo estado de abandono, se encuentra cerca de los anteriores molinos.
Molino de los Moros
Desgraciadamente este molino ha desaparecido con el paso del tiempo.
Molinillo
Un molino que desapareció por la construcción de la Avenida de los Manantiales.
Molino de Manojas
Situado al final de la plaza de la Costa del Sol se encuentra actualmente ocupado.
Molino del Castillo
Actualmente desaparecido su ubicación era la Calle San Miguel.
Molino de Malleo
Molino desaparecido que se encontraba frente a la iglesia San Miguel.
Molino del Rosario
Desaparecido en la actualidad, en su lugar se encuentran apartamentos.
Molino de la Torre Molinos
Transformado en la actualidad en un restaurante no queda nada de la estructura original.
Molino de la Bóveda
Actualmente un restaurante queda poco de la estructura original.
Molino de la Rotonda
Ha desaparecido con el paso de los años.
El Nuevo Molino
Fue convertido en apartamentos.
Molino de la Esperanza
No queda nada de este molino en la actualidad.
Molino del Pato
Actualmente desaparecido.
Molino de la serpiente
Actualmente desaparecido.
Molino de la Cruz
No queda nada de este molino.
Molino del Peligro
Lo único que queda de este molino es su nombre ya que se usó para bautizar la calle del mismo nombre. El nombre le viene de su cercanía al mar.
Durante esta época, debido al fuerte peligro de incursiones, se decidió construir el Castillo de Santa Clara en 1755. Su localización en lo alto de una colina de La Carihuela, le proporcionaba una gran visibilidad. El castillo fue finalmente abandonado y vendido a George Langworthy a comienzos del siglo XX.
Tras la desaparición de los molinos, Torremolinos acabó convirtiendose en una pequeña población pesquera hasta el siglo XX, en 1950 y especialmente durante los años 60, hubo un creciente y masivo boom turístico en la Costa del Sol.
Un gran número de hoteles y apartamentos fueron construidos durante los años 1950 y 1975; Torremolinos pasó da ser un lugar cosmopolita donde la jet set de la época se reunia para divertirse o descansar. Torremolinos se convirtió en un oasis de tolerancia dentro de la dictadura del regimen de Franco.
Actualmente Torremolinos es un destino escogido por una gran cantidad de turistas cada año, quienes cada verano escogen este municipio para pasar las vacaciones o incluso como segundo lugar de residencia.
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