Estas construcciones megalíticas, muy abundantes en la provincia de Málaga, son un misterio que siempre ha llamado la atención a los visitantes. En Antequera encontraremos tres tipos de dólmenes en un área de 3 kilómetros.
- Dólmen de Menga
- Corredor de Viera
- Toloi del Romeral
La presencia de tantas estructuras megalíticas nos muestra que esta zona tuvo gran importancia en el pasado y que seguramente fue muy sagrada.
Dolmen de Menga es una galería cubierta por 5 grandes lápidas de piedra, la más grande pesa aproximadamente 180 toneladas. Es uno de los dólmenes más espectaculares de Europa.
Dólmen de Viera situado a 70 metros del dólmen de Menga presenta un corredor con una sala de enterramiento al final del mismo.
Dólmen del Romeral es un monumento realizado con piedras algo más pequeñas que las de los anteriores monumentos, con un corredor similar al Dólmen de Viera.
El origen de estas construcciones megalíticas se calcula que es de alrededor de 3000 o 2000 años antes de nuestra era, aunque podrían ser más antiguos. Quién quiera que lo construyera debió contar con una densa población, una organización social mayor que la de un asentamiento y una jerarquía establecida. Podría ser que fueran de las primeras civilizaciones agricultoras que comenzaron a asentarse y desarrollaron su cultura y sus creencias en la zona.
Quien se aventure a descubrir los dólmenes en las afueras de Antequera descubrirá monumentos que han sobrevivido hasta nuestros días en perfectas condiciones. Puedes además visitar la Colina Marimacho a 200 metros de altura situada al este de los dólmenes y donde existió una pequeña aldea con casas subterráneas que datan entre los años 2600 y 2200 antes de nuestra era, una aldea que probablemente participó junto a otras comunidades en la construcción de los dólmenes, algo que muy difícilmente llegaremos a descubrir pero que sin duda merece la pena visitar.